sábado, 22 de noviembre de 2008

Sinterklaas

Ahora que el invierno ya está aquí, con nieve incluida, voy a hablar de la versión belga/holandesa/alemana de Papa Noël. Es decir San Nicolás. O Sinterklaas en holandés.

Este señor es un obispo con una barba blanca y que va vestido de rojo y que viene a traer regalitos a los niños que han sido buenos y han dejado su zapato en la puerta. ¿A qué suena familiar?
Las diferencias empiezan porque este señor en vez de tener un trineo tirado por renos viene montado en un bonito caballo blanco y llega el día 5 de diciembre por la noche. Esa noche deja los regalitos y dulces (por cierto tiene unas galletas de canela que están riquísimas), se bebe la copa de vino que le han dejado los niños, pilla las manzanas para el caballo y se vuelve a casa después de una dura noche de curro.

¿Y dónde está su casa os preguntareis? Pues depende a quien le preguntes, pero desde luego este hombre es más espabilado que su tocayo Santa Claus. Según los alemanes vive en Turquía, pero según los belgas y holandeses San Nicolás vive en España (como la mitad de los jubilados europeos vamos) y cuando se vuelve se lleva con él a los niños que han sido malos.
No sé si lo hace porque come niños o porque necesita mano de obra barata porque no tiene duendecillos mágicos que le hagan los juguetes. La gente no ha sabido decírmelo. Cuando no necesita niños, parece ser que les deja sal como castigo en vez de dulces. Que bueno rico no es, pero es más práctico que el carbón.

A pesar de que no tenga duendecillos, Sinterklaas tiene una especie de paje/sirviente, Zwarte Pete, (en inglés algo así como Black Pete). Supuestamente es negro porque está lleno de hollín de bajar por la chimenea para dejar los regalos a los niños (vamos que San Nicolás currar al final no curra tanto), pero si ves los dibujos que han por toda Holanda lo que piensas es que el san Nicolás este además de robar niños tiene esclavos.
Eso o que Baltasar anda fatal de pasta y tiene que pluriemplearse para poder comprar los regalos para el 5 de enero.

En cualquier caso, es una excusa como otra cualquiera para zampar dulces, chocolate (si te gusta) y hacer regalos/quedarte sin un duro antes de que termine el año.

jueves, 6 de noviembre de 2008

Mi profe está de la olla

Pero es muy muy majo.

Y no lo digo solo por su sentido del humor.
Pongo en antecedentes: normalmente la clase dura como dos horas, así que a la mitad hacemos un descanso de 15 minutos más o menos y para saber cuando toca el descanso coloca una transparencia con una foto de comida y que dice Break o algo similar.

Bueno pues está ha sido la foto de hoy:

xDD Si es chorizo y es que como ha dicho era un homenaje a la sección española de la clase (somos 3 españolas en una clase de 12-13).
Ha quedado muy simpático y más nuestras caras de alaaaaaaaaaa chorizo!! Jo que hambre nos ha dado la transparencia xD

Ale para que luego digáis que no cuento anécdotas :P

domingo, 2 de noviembre de 2008

Síndromes variados

Me acabo de dar cuenta que soy la peor blogger del mundo, porque soy incapaz de seguir un ritmo constante. Tengo miles de excusas y razones para ello, pero no son importantes. Mi resolución del día de los Santos (si se hacen en Año Nuevo ¿por qué no en otras fiestas? :P) es intentar volver a escribir algo al menos una vez cada 15 días.

Supongo que debería hacer un resumen de a qué me he dedicado antes de ir directa al tema de los síndromes, así que preveo que esto se va a alargar. A lo que me he dedicado desde finales de septiembre se puede resumir en: vida Erasmus, exámenes, trabajos y presentaciones que me había currado entre cero y nada, problemas informáticos gracias a un portátil que está intentando suicidarse, vuelta a casa a ser cebada durante 6 días y vuelta a Amsterdam.

La vuelta a casa fue maravillosa aunque muy corta, pero al menos así no me dio tiempo a aburrirme. Eso sí aparte de que ver a la familia y los amigos es maravilloso también puede ser surrealista. Sobretodo cuando te dicen tus padres que has crecido a estas alturas de la vida...
Evidentemente no tenerme en casa dando la plasta altera sus percepciones visuales xD. Pero la vuelta a casa me lleva a uno de los síndromes que estoy experimentando.


Síndrome del emigrante
Que básicamente en que cuando vuelves todo te parece maravilloso y precioso. Y que sí mi ciudad es bonita, pero tiene problemas como cualquier otra (o más porque el alcalde además de inútil es gilipollas pero bueno...) y soy consciente de ello. Lo que no esperaba es que echara tanto de menos unas cuantas calles, coches y conductores psicópatas. O el ruido de fondo en un idioma que conoces aunque no le vayas prestando atención. Nunca me había dado cuenta de lo frustrante que me resulta no entender las palabras de la gente cuando vas en un autobús incluso aunque no tengas interés por saber que pasa con su tía Pepi.
En cualquier caso se resume en una sensación de: "que bonito mi país y porque demonios quería irme a vivir fuera."

Síndrome bipolar del residente
Está asociado al anterior y es que al volver de vuelta a Amsterdam tampoco pude evitar el "Dios me encanta esta ciudad." Porque es cierto, creo que me quedaría a vivir aquí si pudiera. Lo cual indica que tengo una cierta atracción por las ciudades caóticas en que la gente va a su bola. Nada sorprendente teniendo en cuenta que yo también soy así.

La parte "graciosa" (y con graciosa quiero decir irritante pero me lo tomo con humor) es que ahora tengo un cacao de idiomas maravilloso. Y soy consciente de que no siempre hablo de forma perfecta y que a veces parece que hablo en un idioma propio, pero esto es pasarse.
Ya me he encontrado varias veces pasando del inglés al castellano y viceversa sin darme cuenta. Lo cual si hablas con alguien que entiende los dos idiomas es raro pero bueno. Pero cuando pasas a hablarle en español a un holandés que ni papa de español entonces da bastante vergüenza.
Lo que me pregunto es porque me está pasando ahora y no cuando llegué en agosto. Será porque tengo que ser un bicho raro, para variar.

Síndrome del Estudiante Erasmus
O como currar lo menos posible, beber lo más posible sin necesitar un transplante de hígado y ser entendido en varios idiomas aún estando borracha y aun así dar a entender a tu coordinador que, si, tu has venido aquí a estudiar. Por cierto soy fatal en lo ultimo, ya he recibido un email en plan "ya puedes matricularte de más créditos el cuatrimestre que viene bonita..." Uups...
Pero esto ha llegado a tal punto que estoy planteándome no hacer prácticas aquí como había planeado y seguir haciendo asignaturas. Y me lo planteo porque prácticas significaría estar currando de 9 a 5 de lunes a viernes y no sé yo si puedo seguir este ritmo sin mi siesta de los jueves y levantarme tarde los lunes. Por no hablar que me fastidiaria cualquier viajecito/visita porque del curro no te puedes escaquear así como así...

Hay otros síndromes rondando por mi cabeza como el del independizado pero ese ya lo resumí en mi anterior post. Aun así pregunta a navegantes: que tamaño deben tener las pelusas para considerar que ya toca barrer? Porque estoy planteándome que si las domestico quizás podemos vivir en amor y compañía a cambio de que ellas limpien el baño...